Mi peregrinar en el ejercicio de la pintura se da con esta serie que termina siendo mi primer exposición individual en un lugar tan mágico como el centro de Mexicali, mi ciudad natal y marca además un salto al vació para terminar con un momento muy postergado influenciado por los años de mi formación académica los cuales marcaron unos parámetros muy altos en lo tocante al manejo de las técnicas de representación y dominio de la figura humana.
“La pintura es un camino” y la única manera de que ella te transporte a algún lado es andarlo y es en esa medida me he ido involucrando con ella ya que además tiene una estrecha relación con mi formación como diseñador gráfico, en ese tiempo todo esta circunscrito a la enseñanza de los maestros ó visitar las bibliotecas, toparse con una revista especializada ó tener la gran fortuna de ser dueño de un libro que versará sobre arte.
La formación académica era muy distinta a la de el día de hoy, basta decir que no había internet, el mundo era otro y las fuentes de información totalmente finitas y con límites muy marcados ya que se encontraban circunscritas a lo que el maestro sabía ó a la época sobre la que versaban los textos que lograbas consultar.
La historia nos enseña que el diseño gráfico es un apéndice de las artes y por ende su vehículo eran las artes plásticas, pero como en esa época se pensaba que no tenían el peso ó quizás por la necesidad imperante de tecnificar la profesión se les cambio el nombre a “técnicas de representación gráfica”, ya que estas planteaban la incorporación de procesos más técnicos como lo son la impresión off-set, la serigrafía y el uso de la fotografía entre otros para la masificación de la imagen.
Queda claro que los fundamentos del diseño y su relación con el arte nos hablan de una disciplina proyectual que a través de el manejo de los materiales y la plástica nos plantea que diseñar es en esencia un acto humano. Más sin embargo con el advenimiento de la computadora termina mudándose primero al vector para después subordinarse por completo al pixel y terminar siendo lapidada por los medios digitales.
Pertenezco a una generación de ruptura, que para incorporarse al mercado laboral tuvo que mutar su relación con la imagen, por ello La añoranza de evocar la complicidad plástica de los materiales me hace atesorar el estar parado frente a un lienzo, así como sentir la mágica sensación de la pintura entre los dedos en un espacio de embriagadora sensación de libertad, que me provoca a dirigirme, un paso a la vez, rumbo al horizonte de la utopía, la cual en una inevitable concatenación de pensamientos se alejará a ese mismo paso para nunca ser alcanzada.
Mis #DosMonedas sobre Nono esta primer experiencia la cual me hablan de un salto al vació que da inicio a una decisión postergada por muchos años pero que hoy día es parte fundamental en mi sentir como persona. Muchas gracias por acompañarme a través de esta lectura, los invito a ver el video blog enYoutube donde podrán encontrarme como: nono lat
Espero volvamos a encontrarnos muy pronto.